sábado, 7 de junio de 2014

REFLEXIONES DE MÓNICA: LA IMPORTANCIA DEL ORGULLO...


Hola a todos,  hoy ha ocurrido un acontecimiento en mi trabajo que me ha hecho reflexionar... el caso es que ahora en mi trabajo atravesamos una lucha de poder... se van a hacer cambios en los cargos altos y la gente está nerviosa, hasta tal punto que hoy ha habido una batalla en toda regla... La guerra se ha desatado y la lucha es dura y eso que no hay armas, pero a veces sin armas, con las palabras simplemente, también se pueden provocar grandes heridas...

La buena noticia es que las palabras te pueden herir si tú lo permites y das tu consentimiento, si no te crees lo que te están diciendo o no piensas que sería terrible que fuera verdad eso que te están diciendo, el abuso verbal no tiene efecto y el abusador busca otra víctima. El problema viene cuando nos creemos que el abusador  verbal tiene razón.

En fin, una vez se ha desatado la guerra, hay peleas verbales, malas formas y malas caras... pero hoy me he dado cuenta de una cosa, en el fondo es todo una cuestión de orgullo, como se da una importancia extrema al cargo, ya no por el dinero que se pueda cobrar, no qué va... no es eso, sino que es por el prestigio, la clase que da el tener un cargo más o menos importante... el cargo hace que estas personas se sientan superiores a las otras sólo por el hecho tan simple de tener una categoría en el trabajo más alta y entonces actúan en consecuencia. Y se agarran al cargo porque claro si pierden ese cargo ¿dónde está su valor como persona? una vez se pierde el cargo ya no queda nada más...  es un comportamiento del todo locuelo...

Por eso cuando existe el peligro de perder ese cargo se entra en conductas del todo neuróticas y eres capaz de luchar a muerte puesto que están a punto de arrebatarte tú valor como persona!!!! y por tu orgullo matas!!! en la administración no matas con armas pero lo intentas de otras maneras... es muy, muy curioso... y hoy me ha hecho recordar una cosa que me explicaba nuestro colaborador Julio y es la importancia que le dan los chavales a veces a su orgullo, como porque otro chaval no te quite tu balón y quedes en ridículo delante de todos eres capaz de perder la vida, enfrentándote al chaval que quiere quitarte el balón y que puede ir armado de verdad ....

Todo es una cuestión de orgullo, en este caso es entre pandillas de adolescentes pero es el mismo caso que en la administración, el valor de la persona da igual que se ponga en un balón que en un cargo, o en lo que van a pensar de nosotros si nos dejamos quitar ese balón o ese cargo... el valor de una persona no es nada de eso... Otra vez más ponemos nuestro valor como persona en lo que hacemos, tenemos o en lo que los demás piensan de nosotros.

Es muy interesante liberarnos de nuestro orgullo, el orgullo es muy muy poco importante, darnos cuenta que nuestro valor como personas es mucho más, que nuestro valor como persona está en nuestra capacidad de amar, en nada más, ahí está la clave.

En mi trabajo, a veces y como en muchos trabajos, se ven situaciones muy clasistas, como hay gente que no se relaciona con según quien porque lo considera inferior y si los demás le vieran con esa persona le quitaría mucho de su prestigio... parece mentira que esto exista hoy en día pero es la realidad. Sin ir más lejos hay quien no se relaciona con el equipo de limpieza de las oficinas donde trabajo yo, y sin darse cuenta se están perdiendo la oportunidad de conocer a gente maravillosa... como Perla una mujer ecuatoriana que es increíble, una superviviente que se ha convertido con los años en una de mis mejores amigas.

Un beso a todos,

Mónica

17 comentarios:

  1. Gracias !!!! GRACIAS!!!!! La fórmula para HACERNOS RICOS.......EMOCIONALMENTE!!!!

    ResponderEliminar
  2. Hola. Soy María José, valenciana. Hace años ocupé un puesto de dirección. Siempre me ha gustado la gente sencilla y humilde. Con la mujer que venía a limpiar mi oficina me llevaba super bien, nos reíamos mucho a las 8 de la mañana. Se llamaba Lola. Por una decisión mía, dejé mi trabajo y después de mucho tiempo, tengo necesidad de trabajar y como no encuentro trabajo de oficina pues limpio casas, chalets. De mis amigos no sé nada pero yo soy asistenta, chacha y también cuido de dos niños que son una maravilla... Cambiando de tema,¿ porque no haceis charlas en Valencia?

    ResponderEliminar
  3. Buen artículo, Mónica. Resulta siempre muy interesante reflexionar por escrito tras un acontecimiento que pueda desestabilizarnos. A veces, no es fácil descubrir cuál es el pensamiento irracional en el que hemos caído y tú aquí lo localizas rápidamente: basar nuestra valía personal en conceptos como el orgullo, mantener nuestra imagen a toda costa.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Mónica me ha encantado tu reflexión, llama la atención que en todos los trabajos pasa practicamente lo mismo, más o menos el mismo tipo de personas, los patrones se repiten. ¿No te preocupa que alguien de tu trabajo pueda leer tus reflexiones?
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Me encanta tu reflexión Mónica. En mi trabajo yo q soy enfermero también veo y observó esa lucha de poder. También veo envidia o comprensión por parte de otras personas cuando por ejemplo yo que soy enfermero me tomo un café con alguna auxiliar o incluso también alguna chica de la limpieza q son todas encantadoras.diferente lo verían y también lo ven cuando desayuno con médicos q también lo hago. Parece co o si ganará más prestigio de cara a otras personas. Que estupidez más grande verdad? Amar y hacer el bien sienta muy bien . Besos para ti monica

    ResponderEliminar
  6. Tienes toda la razón Mónica . El orgullo hace que las personas pierdan la cabeza . Muy buen artículo. Saludos

    ResponderEliminar
  7. En el fondo, el orgullo, como tantas cosas de nuestra vida que nos ocasionan malestar, nos afecta y adquiere importancia en tanto en cuanto nos importe lo que el resto piense de nosotros. Y es una pena estar más pendientes de lo que el resto piensa de mí que de lo que yo misma pienso...

    ResponderEliminar
  8. Hola Noelia, muchas gracias por escribir!!, no, no tengo miedo que alguien de mi trabajo lo lea, es más me gustaría que leyeran este artículo para reflexionar.

    Un fuerte abrazo!!!

    ResponderEliminar
  9. María José, si te refieres a las tertulias, el año pasado se creó un grupo pero el coordinador que llevaba las tertulias en Valencia dejó de hacerlo y ahora necesitaríamos un nuevo coordinador/a que impulsara las tertulias.
    Si te refieres a las charlas de Rafael, las va anunciando en su facebook.
    Un fuerte abrazo!!!

    ResponderEliminar
  10. Y como podriais conseguir un nuevo coordinador?
    Rafel viene por Valencia?

    ResponderEliminar
  11. Tendremos que estar atentos a como piensan. Si descubrimos que alguien nos valora por otra cosa que no sea la capacidad de amar, de disfrutar. Darnos cuenta y no valorarnos por nuestros fallos concretos, o los fallos que nos quieran endosar. Si nos convencen que no valemos por habernos equivocado o por un logro, estamos perdidos.
    Y si no nos quieren en todo momento, podemos pasar un espacio de tiempo sin su valoración o buen trato. No necesitamos su cariño y aprobación en todo momento.
    Y si nos equivocamos y respondemos mal..., podríamos darnos cuenta. Cuanto antes mejor. Antes de prendernos en odiarles. Podemos fallar, lo que tendremos que hacer es darnos cuenta y saber parar. No somos lo que sentimos, podemos sentirnos ansiosos e iracundos y ello no quiere decir que necesitemos sentirnos bien siempre. Podemos retomar nuestro buen dialogo interno.
    Y si tampoco podemos hay que cambiar de tema. Ya sabemos que una vez de quicio es dificil pensar bien. Hay que ir a la distracción cognitiva, descansar.
    Bueno, esta vez me puse en lo peor. Pero hay que estar preparado. A veces no nos damos cuenta a la primera. Lo que ellos quieren es que entremos al trapo y nos prendamos en más abuso.
    Un abrazo. Gracias por la sinceridad. Me gusta la reflexión.

    ResponderEliminar
  12. Hola Mónica.

    Me encantó el post.

    Llevas muy bien el inconveniente en el trabajo que cuentas en el post, estupendo!

    Sí, es verdad. En muchos casos, cuando tenemos necesititis, esta va unida a una no autoaceptación incondicional. Ej: como "necesito" novia y no la tengo, soy un fracaso absoluto.

    Trabajar este tema viene muy bien para ir por este mundo sin creernos las locuras de los demás, lo que hace que nos relacionemos con tranquilidad, alegría y amor, sin aislarnos "por" si alguien pudiera hacer abuso verbal contra nosotros, e incluso comprender su locura.

    Cada pocos días me visualizo muy bien abajo (y con todos los argumentos disponibles que conozco: impedimentos/posibilidades, comparación ,existencial, cap. de amar versus eficacia,...): siendo retrasado, torpe en muchas cosas, hortera, feo, tartamudo, mal músico,... Incluso aceptándome ante la posibilidad de haberme portado mal (incluso siendo un delicuente locuelo). Además, estando débil emocionalmente y sin dejar de ser una persona bella por ello. Todos somos valisosos por la semilla del amor (hacia los demás, la vida y uno mismo), o sea, sólo por estar vivos.

    Un besazo!!!

    ResponderEliminar
  13. Tienes toda la razón David!!!

    Un abrazo muy muy fuerte!!!

    ResponderEliminar
  14. Gracias Luís, me encanta la frase: "no somos lo que sentimos"

    Muchas gracias Luís por tus reflexiones siempre tan y tan trabajadas, son totales!!!

    Un fuerte abrazo!!!

    ResponderEliminar
  15. Pues mira María José, por qué no te lanzas tú a ser coordinadora?, realmente ser coordinador es muy fácil!!!, se trata de buscar un sitio tranquilo, buscar día y hora y quedar para hablar de capítulos de los libros de Rafa, o de artículos del blog... yo en Barcelona hago resúmenes de los capítulos del libro de Rafa y luego los comentamos entre todos. No hace falta ser psicólogo, cualquiera puede ser coordinador de nuestras tertulias.

    Bueno a ver si nos sale ese coordinador en Valencia!!

    Un beso María José!!

    ResponderEliminar