"Geovani estacionó su motocicleta en la acera, frente al edificio social pasionista, en la Avenida Montreal, de Mejicanos, mientras era observado por su asesino. Cuando Geovani notó su presencia, el gatillero estaba a unos pasos. Lucharon unos segundos y Geovani recibió el primer balazo en la parte posterior de la cabeza, cuando intentaba embestir a su asesino para arrebatarle el arma, cayó de rodillas. El gatillero le remató de un balazo y escapó. En la acera quedaron el casco y las llaves de la motocicleta.
Desde el segundo piso, el padre Antonio Rodríguez alcanzó a ver el momento en que el tirador escapaba y se volvió para echar el último vistazo a Geovani. Cuando bajó a la calle, el cadáver de Geovani aún no se había terminado de desangrar y de su cabeza manaba un manto caudaloso de rojo intenso..."
Mientras leía esta historia os aseguro que se me caían las lágrimas... tremendo... es una historia real que ocurrió hace muy poquito en El Salvador... el padre Antonio Rodríguez, padre Toño, nacido en Daimiel, Ciudad Real, dirige un programa de rehabilitación y reinserción de pandilleros en el Salvador y Geovani era fruto de su esfuerzo y el argumento al que él más recurría como prueba de éxito de su programa de rehabilitación...
Geovani era panadero de oficio, aunque la mayor parte de su vida se la entregó a una mara (pandilla) en El Salvador, el padre Toño lo había empleado como coordinador de su programa y su trabajo consistía en encontrar pandilleros con deseos de dejar la vida criminal y orientarlos para poder hacerlo... El padre Toño sabía que la muerte de Geovani en el fondo fue un instrumento para hacerle notar desde otros ámbitos... que no continuara con su proyecto...
Pero de este golpe tremendo el padre Toño se repuso y siguió adelante aún con más fuerza con su proyecto en El Salvador..., os acordáis de la maravillosa frase que a mí me encanta: cuando uno se cae se levanta!!! y eso es lo que hizo el padre Toño!!!
Sin embargo, ayer, 30 de julio, nos dieron la noticia de que había sido detenido... esperamos todos que pueda salir airoso y que pueda probar su inocencia de todo lo que se le acusa... seguro que sí!!! estoy segura que saldrá aún más reforzado y con más fuerza!!! aunque sí que es verdad que no sabemos cómo lo debe estar pasando ahora...
Un ejemplo sin duda el padre Toño de fortaleza, de no tener miedo y de entregar su vida a esos chavales que tanto necesitan que les enseñen a vivir sin violencia... todo esto está ocurriendo en nuestro mundo actual!!, sales a la calle en según qué países y te pueden matar... la vida vale muy poquito en según qué zonas... pero sin embargo nos seguimos quejando y quejando de cosas absurdas, como qué mi jefe me trata mal, qué tengo un trabajo de pena, qué mi pareja no me da el cariño que yo me merezco... ¿qué nos diría el padre Toño que ahora está preso de todas estas quejas?, somos muy muy afortunados... sin embargo a veces se nos olvida... mirad la vida que llevó Geovani y cómo acabó... y el padre Toño que pese a esa muerte supo reponerse y seguir trabajando... fuera quejas amigos!!!!, no tenemos motivos para quejarnos porque somos tremendamente afortunados de tener lo que tenemos y de haber nacido donde hemos nacido...
Otro ejemplo es nuestro querido Jaume Sanllorente que gracias a la compra de un orfanato que iba a desaparecer pudo salvar a un montón de niños de caer en redes de prostitución, sin embargo su vida está en peligro, está constantemente amenazado por las mafias indias... en una entrevista una vez que le hizo Rafael, le preguntó:
- ¿Cuál es, entonces, el secreto de la felicidad?
- No me cabe ninguna duda: hacer felices a los demás. El verdadero objetivo de la vida es ése. Estamos hechos para eso.
- ¿Ni siquiera teme a la muerte, estando amenazado?
Pues no, porque mi vida ya ha valido la pena para mí. Podría vivir más, pero con lo que he tenido, ya estoy satisfecho.
Cuando nos empecemos a quejar de nuevo de cosas absurdas nos tenemos que acordar de Jaume Sanllorente y del padre Toño, dos hombres maravillosos llenos de amor y que quieren repartir ese amor a los demás...
Deseo de todo corazón que el padre Toño en estos momentos se encuentre bien, y desde aquí le mandamos toda la suerte del mundo para que muy pronto recupere su libertad y pueda seguir ayudando a esos chavales maravillosos.
Un beso a todos,
Mónica
Poner la referencia en que mucha gente está peor y tenemos que estar agradecidos no me parece apropiado y no va con la filosofía de "El arte de no amargarse la vida" ni "Las gafas de la felicidad". El mensaje debería ser que hay que ser felices con lo que se tiene aunque te toquen cosas malas , puedes ser feliz y trabajar por mejorar, como en esta historia. Si ponemos el foco en mirar a los que están peor corremos el riesgo de compara con quien está mejor. Sentirse afortunado por tener mejores cosas y situaciones es precisamente uno de los errores que indica Rafaél.
ResponderEliminarSi Santi tienes razón, pero las comparaciones sanas como las llamo yo son buenas, porque en realidad se trata de apreciar lo que tenemos pero no para creernos mejores o sentirnos superiores, ni mucho menos!!! si no para valorar desde un plano realista lo que tenemos. Vivir donde vivimos es una suerte porque sales a la calle y no te pegan un tiro, no es compararse con el que está peor, es valorar lo que tenemos!!
ResponderEliminarLa verdad es que no tenemos motivos para quejarnos (ni siquiera por estar mal alguna vez) como demuestra este post.
ResponderEliminarVaya historia. Historias quiero decir. Estas dos personas son un ejemplo de fortaleza. Y también en particular el padre toño de aceptación incondicional. Si queremos cambiar a la gente será desde el amor. Los palestinos e israelíes como sigan con que esto o lo otro no es justo y no lo puedo soportar, no van a cambiar nunca. Gandhi y Mandela nos mostraron el camino: el amor incondicional y la flexibilidad.
Y sí, somos muy afortunados!!!, que nos lo digan estas dos personas, o la gente que vive ahora en Palestina y cada poco escucha bombas caer e incluso gente cercana morir.
Muchísimas gracias Mónica por tu estupendo post!
Cómo en gusta este blog!
Un besico muy grande!
Gracias a ti David!!!!! Qué guay que comentes los posts!!!!
ResponderEliminarEn el capítulo 2 de El arte de no amargarse la vida se habla de Jordi, el estudiante suicida. Unas páginas más adelante, en el capítulo 3, referido a Basta de dramatizar, en el epígrafe objetividad emocional se dice lo siguiente:
ResponderEliminar".... la sana comparación es una condición esencial para poder evaluar con mayor corrección y tener una mente más saludable. Para saber si algo que me ha sucedido o me podría suceder es "un poco malo" o más bien es "terrible", tengo que comparar esa situación con "todo" lo que me podría suceder.
En ese sentido, suspender tres asignaturas no puede ser nunca calificado de terrible comparado con sufrir una enfermedad grave, perder a un ser querido, estar en medio de una guerra.... Este punto suele ser difícil de aceptar para muchas personas, pero yo les suelo argumentar que la ciencia se basa en la comparación. Es más, cualquier conocimiento parte del ejercicio básico de comparar. (...).
Los seres humanos sabemos, conocemos, a través de distinguir diferencias y comparar unas cosas con otras. Por lo tanto, cualquier intento de ser más objetivos pasa por comparar de la forma más eficiente posible. !Si queremos saber, hay que comparar! Pero para hacerlo bien hay que comparar con todo el mundo, con la comunidad de todos los seres humanos, con todas las posibilidades reales que se dan en la vida, sin esconder la muerte, las enfermedades, las carencias básicas.... Una vez más, un buen ejercicio comparativo nos enseñará que los seres humanos necesitamos poco para ser felices, y esa capacidad la tenemos todos, vivamos donde vivamos: en África, España o Marte, si es que habitamos un día ese planeta.
A veces, nos volvemos neuróticos cuando nos centramos en nosotros mismos como niños pequeños que se creen el centro del universo. !Y lo cierto es que no somos el centro de nada! Muchas veces, cuando propongo a mis pacientes que se comparen con personas que viven en regiones pobres de África protestan diciendo: "¿Por qué tengo que compararme con un pobre africano? !Yo vivo aquí en Barcelona y nunca viviré la situación que viven ellos!".
Pero en mi opinión, hay que abrirse a la realidad del mundo porque la situación de otras personas que viven en entornos diferentes nos informa, una vez más, de las necesidades básicas de los seres humanos. Si una familia china o africana viven felices porque tienen cubiertas las necesidades básicas de alimentación, eso significa que los seres humanos en general pueden ser felices una vez cubiertas esas necesidades.
A veces, vivimos en sociedades tan artificiales que llegamos a pensar que si no tenemos un piso en propiedad o no podemos permitirnos una vacaciones en la playa no vamos a ser capaces de sentirnos bien. Eso es estar fuera de la realidad. Eso quiero decir cuando hablo de tener un criterio abierto al mundo, esto es, ser consciente de la realidad del ser humano: la realidad de África es también la nuestra."
Estoy de acuerdo con Santi, si nos comparamos en lo malo, lo siguiente es compararnos con lo bueno, es la trampa donde se cae muchas veces. Es mucho mejor la formula de la aceptación de uno mismo y de la no queja.
ResponderEliminarNo podemos dogmatizar con teorías que pueden parecer eficaces, demasiados fáciles pero que si las analizas tienen muchas fugas. No existen milagros y aprender a ser fuertes y vivir la vida de manera agradable pasa por un trabajo interior duro y nada fácil, la vida también es sufrimiento y es el sufrimiento el que nos cincela y nos va haciendo mejores personas, además no es malo sufrir un poco. Yo me considero una persona muy feliz, pero a veces tengo alguna crisis y lo acepto, porque es imposible estar siempre "de guays"
Me encuentro muchas veces con incoherencias, "CUANDO HABLO CON PERSONAS QUE LO TIENEN TODO MUY CLARO" se saben la teoría de carrerilla, te dan lecciones y ellos mismos se contradicen: piden ayuda para lo que les interesa y después si intentas pedirla tu, entonces no te apoyan y te dicen que hay que ser fuertes mentalmente.
Somos humanos y esta factor tiene un peso. No me gustan las personas que van dando lecciones. Me gusta Rafael Santandreu!!!!
La vida es mucho mas simple, no le demos tantas vueltas a todo.
ResponderEliminarNadie tiene la verdad absoluta y todos somos imperfectos .nadie pretende dar lecciones porque nadie puede darlas.
Yo solo sé que no sé nada y aun eso, lo dudo
Gracias María José por tu comentario, yo sólo tengo clara una cosa y es que yo soy muy mediocre en todo.
ResponderEliminarLo mejor de todo y que quería compartirlo con vosotros es que han liberado al Padre Toño y podrá seguir trabajando con sus chavales en El Salvador, es una gran noticia!!!
Que bella historia Mónica, que ejemplazo de vida el padre Toño... pese a no ser creyente, puedo dilusidar de mis estudios (me gusta mucho la historia) qque los sacerdotes siempre han sido quienes han estado "dónde las papas queman" como decimos acá, dónde el débil necesita ayuda, dónde a las personas les falta amor... desde tiempos inmemoriales....
ResponderEliminarUna gran lección, ya basta de gilipolleces como dicen ustedes (es eso algo que no debo decir en público? jajaja) seamos felices y dejemos de quejarnos ya!
Besotes!!!!!