jueves, 31 de marzo de 2011

REFLEXIONES DE MÓNICA: “ES UNA INJUSTICIA...”

Hola a todos, hoy os voy a contar una historia que me ha ocurrido esta semana. En mi trabajo existía la oportunidad de ocupar una plaza directiva y éramos dos las candidatas a ocupar esa plaza tan apetecible,  las dos nos conocemos desde hace bastante tiempo y siempre ha habido buen ambiente. Pues bien, quien tenía que escoger escogió a la otra persona y no a mí. Bueno, esta primera noticia la encajé bastante bien pues tampoco tenía muy claro si quería dedicar más horas de mi tiempo libre al trabajo y, esa plaza directiva requería ese esfuerzo. Felicité a mi compañera a la cual además le tengo mucha confianza y me alegré por su logro. 

Hasta aquí todo correcto, pero se daba el caso que mi antigua compañera ocupaba una plaza de un poquito más de nivel que la que ocupo yo y que ahora tenía que abandonar para ocupar la plaza directiva. Además era ella la que tenía que escoger quien ocuparía su antigua plaza. Pues inmediatamente yo pensé: como es mi antigua compañera la que decide ahora esto, pues seguro que me escoge a mí, vamos seguro no, segurísimo!!. Además sería lo justo, es lo que debería ser, es imposible que la que ahora es mi jefa y que antes era mi compañera no se acuerde de mí para esta mejora económica... 

Pues bien chicos, mi sorpresa fue cuando la que había sido mi súper compañera y ahora era mi jefa prefirió a otra persona para ocupar esa plaza tan golosa. Yo estos días me he indignado, no he parado de llorar, he dicho mil veces que era una injusticia este hecho... bueno ya veis... un comportamiento no muy racional... pero ahora que ya estoy más calmada lo veo todo mucho más claro. 

Yo había exigido que las cosas me tenían que salir de una determinada manera y que me tenían que ser favorables. Pues bien, a veces y es la realidad, las cosas que nos va presentando la vida no surgen como nosotros pensábamos, es lo que hay y lo tenemos que aceptar. Nos tenemos que acordar de la autoaceptación incondicional de la vida. 

Por otro lado yo estaba exigiendo a mi antigua compañera que me tenía que escoger a mí, pero ¿dónde está escrito eso?, y ¿por qué me tiene que preferir a mí?, si  que es verdad que yo creía firmemente que lo justo era eso, pero ¿y por qué la gente no puede decidir algo que no sea justo?. No siempre los demás van a hacer lo que nosotros queramos que hagan. Aquí nos tenemos que acordar que tenemos que conseguir la autoaceptación incondicional de los demás. 

Muchos compañeros de mi trabajo durante estos días me han dicho: pero no ves que te está pisando, como permites que te humille de esa manera.... yo antes de reflexionar también pensaba un poco así pero ahora no, el que consigue estar más abajo pero estar bien y tranquilo es el que está más arriba. Porque aunque no sepa hacer nada bien siempre tendré la capacidad para amar. Igualmente yo estos días he dado mucha importancia al dinero, ¿de verdad os creéis  que el dinero da la felicidad?. La felicidad no la obtendremos consiguiendo plazas absurdas, ni enfadándonos por injusticias. La felicidad la obtendremos aceptando con calma y serenidad lo que la vida nos vaya presentando, intentando disfrutar de las pequeñas cosas y teniendo en cuenta que necesitamos muy poco para ser felices. 

Estos días yo pensaba que esto que me había pasado era terrible y estaba equivocada, simplemente ha sido una cosa muy, muy, muy pequeñita. Por cierto, cuando empecéis a terribilizar por lo que sea y no os salgáis de esa terribilización y cada vez se haga la pelota más grande, os animo a que escribáis lo que pensáis y busquéis los pensamientos irracionales. A mí me ha ido muy bien escribir este post para darme aún más cuenta que estaba exagerando. 

Un beso a todos, 

Mónica

5 comentarios:

  1. Amiga Mónica, has descrito unos de los antiguos males de la humanidad.... que en su día alguien asoció a unos demonios llamados Leviatán y Amon (ref. Peter Binsfeld, 1589).

    Piensa que las personas nos guiamos por afinidades, nos guste o no admitirlo.

    Lo verdaderamente importante y razonable, es darse cuenta de nuestro error y poner soluciones, pues realmente, no nos puede afectar nada que no queramos que nos afecte.

    Un saludo sincero ;)

    ResponderEliminar
  2. Hola Mónica,
    Entiendo que de entrada te has llevado un verdadero palo, todos nos sentimos afectados e influenciados por todo lo que nos ocurre a nuestro alrededor.
    Personalmente tampoco creo que sea malo hacerse a veces ilusiones, o esperar algo que uno cree que cree merece, porque no?? La vida es eso, subidas a veces y bajadas otras, la gracia esta en saber tomárselo tan bién como tu, reflexionar, levantarse y volver a intentarlo, se gana o se aprende pero nunca se pierde.
    Todos, o al menos yo, tenemos mucho que aprender de ti. FELICIDADES y Muchos ánimos, y sabes que?? ellos se lo pierden...
    Un beso
    Silvia

    ResponderEliminar
  3. Tienes razón en esto y en muchas cosas que siempre me dices. Si una cosa es cierta es que tatando bien a la gente a veces no eres correspondido, pero otras muchas veces se pueden encontrar grandes grandes amigos, verdad?

    Un beso,

    Mónica

    ResponderEliminar
  4. Hola Silvia, no te pienses, esta vez he perdido bastante los papeles... pero siempre podemos aprender cosas de lo que nos va pasando, verdad?

    Muchas muchas gracias por tus comentarios.

    Un súper beso,

    Mónica

    ResponderEliminar
  5. Así se hace! Buenísima reflexión! Eres un crack.
    Un beso!
    Rafael

    ResponderEliminar