lunes, 25 de febrero de 2013

ME VOY CON LOS MOSUO (extracto del próximo libro)

Queridos amigos/as:
Os paso aquí un trozo de un capítulo que tratará el tema de los celos. Abrazo. Rafael
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En el sudoeste de China, existe una comunidad de unas 50.000 personas que recibe el nombre de etnia mosuo.  Viven junto al gran lago Lugu, un lugar idílico que hasta la década de 1970 estaba prácticamente aislado del resto del mundo. Aun en la actualidad, se tardan 9 horas en jeep en acceder  a su centro geográfico desde la estación de tren o el aeropuerto más cercano. Los mosuo son una mezcla racial entre china y tibetana, lo que les concede unos rasgos faciales muy hermosos.

Los mosuo me recuerdan a los habitantes del Pirineo catalán de donde procede mi padre: gentes tranquilas, afectuosas y en permanente contacto con la naturaleza. Probablemente incluso más relajados y amistosos.

Los mosuo se han hecho conocidos para el mundo de la antropología porque mantienen un claro matriarcado, es decir, las que mandan allí son las matriarcas, mujeres de cierta edad que dirige los avatares de la familia. Ellas son las únicas propietarias. La herencia se transmite de madre a hija, lo que implica que en la región no existen hombres con casa propia.

 

Existen muchos otros matriarcados en el planeta, pero el de los mosuo es el más moderno en términos evolutivos. No se trata de una tribu perdida de la selva sino de personas vestidas al modo occidental y con trabajos similares a los nuestros, pero con un sistema familiar casi opuesto al nuestro.

 

Los miembros del clan eligen a una mujer de un grupo de hermanas para ser la matriarca. Con la ayuda de sus hermanas, ella cuida de los asuntos económicos y sociales de la casa; es la administradora de todas las posesiones: la casa, los campos, los animales domésticos, el alimento y los caballos. Los hermanos y los hijos de las mujeres también dependen de la flexible autoridad de la matriarca.

Cuando los hombres necesitan dinero para cualquier gasto, independientemente de la edad que tengan, deben pedírselo a sus madres o, en su defecto, a sus hermanas. Cuando se les pregunta cuál es la razón para que sean ellas las que manejen la economía responden con naturalidad: "Son mucho más capaces y no gastan en cualquier cosa".

 

Un dato muy destacable es que, como en otras comunidades matriarcales, en estas sociedades no hay violencia; son comunes el buen trato y la hospitalidad. En su idioma no han existido nunca las palabras “asesinato”, “cárcel”, “guerra” o “violación”.

Pero lo más destacado de los mosuo, al menos para al tema de los celos que tratamos en este capítulo, tiene que ver con sus costumbres sexuales y su modalidad de unión conyugal porque estos hombres y mujeres, de hecho, no practican ninguna unión marital. Los mosuo no se casan jamás, no consideran que nadie es amante exclusivo de nadie y practican el sexo libre desde su despertar sexual hasta que se mueren. ¡Y están muy felices de hacerlo así!

 Yang Erche Namu, una mujer mosuo que ha publicado sus memorias de infancia, lo define así: “Nuestras uniones se denominan sesé y consisten en visitas que se pueden repetir o no. Los sesés nunca conllevan ni intercambio de propiedades ni cuidado de los hijos ni, por supuesto, expectativas de fidelidad”.

La lengua mosuo no tiene palabras para “marido” o “esposa”, sino un solo término, azhu, que significa “amigo”.

Cuando una chica alcanza los 14 o 15 años, se le otorga su propio dormitorio, que tiene acceso a la calle a través de una puerta privada. Las jóvenes invitan durante el día a quien ellas desean para pasar la noche en esa habitación llamada “cuarto de las flores”, pero antes del amanecer , cualquier amante masculino debe abandonar la casa.

Adultos relajados, niños felices

En el mundo mosuo cada mujer es libre de escoger siempre que lo desee a un amante distinto; incluso más de uno en la misma noche. Los niños que nacen de esas uniones son cuidados por la madre, la abuela, las hermanas y sus tíos y, en un grado más amplio, por toda la comunidad, pero no existe la figura del padre. De hecho, el rol de educador masculino lo ocupan los “tíos”, que cuidan de él y le enseñan todo lo que necesita un niño o adolescente mosuo.

Yang Erche nos describe su feliz niñez: “Los niños podíamos vagar a nuestro antojo e ir de casa en casa y de aldea en aldea sin que nuestra madre temiera jamás por nuestra seguridad. Todos los adultos eran responsables de todos los niños y todo niño, a su vez, guardaba respeto a cualquier adulto”.

Y es que en esa región, los niños gozan de una calidad educativa fantástica. Yang Erche dice al respecto: “En vez de un padre, los niños mosuo tienen muchos tíos que cuidan de ellos. Y, en cierto modo, también tenemos muchas madres porque a nuestras tías las llamamos azhe ami, que quiere decir ‘madrecita’”.

Los mosuo más activos afirman sin pudor que han tenido cientos de amantes y los celos son tratados como otra muestra de inmadurez impropia de un adulto mínimamente inteligente.

Para conocer más a este maravilloso pueblo, recomiendo ver:

http://www.youtube.com/watch?v=F83eB8TzGMk

O este magnífico documental rodado en 2009, dirigido por Xiadon He y producido por Cine Frontiére.

http://www.teledocumentales.com/tierra-de-mujeres/

20 comentarios:

  1. Estimada Monica personalmente creo que no hay nada mejor en el mundo que tener una buena esposa en la casa con la que compartas tu vida y unos hijos a quienes amar y educar en la libertad y en el amor fiel puro y responsable. Que los mosuo sigan en la suya

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  2. Por lo que leo.( muy interesante) deduzco que su cultura y forma de actuar ,hace de las mujeres que tengan ,mucha confianza, una autoestima muy alta,sean mujeres seguras y eso nos da ,pocos perjuicios ,Esa cultura trasladada a Occidente ,la veo complicada y muy dificil ( pero ,no imposible)

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  3. ¿Qué papel o qué consideración tiene el incesto para este tipo de sociedades/mentalidades tan liberadas sexualmente? ¿Y cómo lo valora la psicología racional?

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  4. A mi parecer es una cultura promiscua dónde solo existe sexo por deseo, no existe el amor, el compromiso, los hijos no conocen a sus padres, simplemente porque las sras no pueden saber de quien se embarazan... En una palabra aberrante.

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  5. Muy bueno, que ganas de hacerme "mosuo"!! Gracias Rafael, espero pronto tu nuevo libro.

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  6. El incesto está prohibido de forma cultural tal y como hacemos nosotros. La psicología racional piensa que no tener relaciones sexuales con tus hijos es bastante razonable por muchas razones prácticas, así que es definitivamente aconsejable no practicarlo en ningún caso. La psicología racional opina que actualmente le damos demasiada importancia al sexo por activa y por pasiva: por hacerlo poco, pero paradójicamente también por tenerlo siempre en mente... Abrazo!! Rafael

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  7. Pero, chicos, ¿qué me decís del hecho de que en esas comunidades no se conoce apenas la violencia? Y, por otro lado, sí existe el amor: los hermanos, madres e hijos y tíos lo hacen; y los amigos también. Simplemente, no existe la figura del padre.
    Por otro lado, una de las experiencias más extraordinarias que existen es el amor por un amigo, cuando la relación es intensa. Por ejemplo, en la actualidad se experimenta cuando vives en el extranjero, y tus amigos son tu familia. La gente se abre y experimenta unos vínculos que dan mucha plenitud. Pero se trata de una plenitud sin ataduras exageradas.

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  8. Muy interesante pero... no me convence!!!
    Al fin y al cabo es una cultura , a la que están acostumbrados ya que nacen con ello, es lo que se les inculcan, igual que a nosotros la nuestra. No dejan de ser normas. En definitiva a ellos les dicen cuando son mayores de edad, qué lugar ocupa la mujer y el hombre(que por cierto ya hablamos de desigualdad) a partir de que edad pueden mantener relaciones sexuales...Ahora, también en nuestra sociedad se ha puesto de moda tener relaciones sexuales con amigos, para disfrutar del sexo. Para mi gusto, yo disfruto de la sexualidad con mi pareja, con mis amigos , padres, hijos y demás familiares, disfruto de otras cosas y por supuesto existen otros sentimientos,

    Me quedo con mi opción.


    .

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  9. ¿De verdad te parece Rafael envidiable o imitable en algo este estilo de vida? Una cosa es la promiscuidad y otra los celos, me parece a mi que estás metiendo en el mismo saco cosas que poco tienen que ver.

    Por curiosidad ¿ los bebés nacen sin problemas genéticos? Si no sabes quién es tu padre quién te dice que no puedes estar acostándote con tus hermanos.

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  10. Gracias Rafael!
    Visto usted hoy en canal dos y encantada con tus palavras tan verdaderas!
    Voy visitar mucho tu blog! ;)

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  11. Que tiene de malo la promiscuidad? No somos promiscuos con la comida o la bebida? Por otro lado, en esta sociedad no se aprueba el incesto. Ese es otro tema.

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  12. Creo que Rafael intenta abrir un poco la mente de sus apreciados lectores mediante la comparación intercultural de las practicas sexuales y romanticas de otros pueblos y lo que mentamos "Occidente." Este ejercicio es interesante para expresar la relatividad de las normas sociales y de como su seguimiento es un asunto de elección repetida en el tiempo y no de otro factor. Las normas sociales no son naturales. No se trata de que ellos tengan esas normas porque son "ellos" y nosotros tenemos otras, porque "somos" nosotros. Unos y otros tenemos reglas porque las hemos elegido. El ser humano es flexible y puede vivir de cualquier manera imaginable. Luego, el ser humano construye un imaginario que hace esa forma de vivir "algo normal", y cuando el ser humano deviene neurotico hace de esa forma de vivir la "única" posible, negando su flexibilidad natural y provocandose la enfermedad de la intolerancia/terriilibiltis.

    La humanidad puede vivir en cualquier forma social, con el unico requerimiento de que esa forma social escogida permita la reproducción social y biologica del grupo.

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  13. Como hay tribus que comen insectos y gusanos vivos y supuestamente son felices, ¿debemos comer insectos y gusanos vivos para ser felices?

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  14. Con todos mis respetos, me parece una cultura peor que aberrante. Y no lo digo por que sea distinta a la nuestra, sino porque vulnera totalmente los derechos de los hombres como seres humanos y atenta contra su dignidad. Si en nuestro país llevamos décadas luchando para acabar con el machismo y poder conseguir una sociedad más justa y con la máxima igualdad entre hombres y mujeres (ya que todos somos seres humanos igual de dignos), no creo que debamos fijarnos en una cultura tan primitiva basada en la total desigualdad, que da a los hombres un papel de meros zánganos que ni siquiera tienen derecho a ejercer de padres (cuidar y educar a sus hijos), cosa que incluso en las épocas de máximo machismo, las mujeres sí tenían.
    Al fin y al cabo, el feminismo extremo que impera en la sociedad mosuo, es igual de malo que el machismo (todos los extremos suelen serlo).
    A mí me parece una cultura totalmente irracional, no sé si desde un punto de vista psicológico (de eso seguro que tú sabes más), pero sí desde un punto de vista social. Y desde luego no me parece para nada un ejemplo a seguir, ni siquiera para conseguir una sociedad no violenta. Para este fin, también podríamos fijarnos en algunos países que consiguen pacificar a su población mediante un régimen totalitario. Pero el fin no siempre justifica los medios.

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  15. La promiscuidad no tiene nada malo, lo que quería decir es que éste no me parece un buen ejemplo para un capítulo que trata sobre los celos. Quizá sí para uno sobre la tolerancia y el respeto a la forma de vida de los demás.

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  16. Los hombres sí trabajan entre los mosuo. Lo que sucede es que las mujeres son las líderes y, entre ellas, la madre-abuela, que ejerce una autoridad suave basada en el amor.

    Por otro lado, los hombres ejercen de tíos, que está genial! Es una relación muy parecida a la de padres.

    Además, en esa cultura, en realidad, todos se sienten responsables de todos los niños: así que también eres tío/padre de un montón de criaturas! Qué bien!

    De todas formas, los mosuo tampoco son perfectos, pero sí es de destacar que practican la poligamia y todo el mundo está contento con eso. Si somos capaces de vislumbrar que nosotros también podríamos ser polígamos, reducimos nuestros celos y conseguimos, si así lo deseas, una monogamia tranquila sin los temidos hiper-celos. Se trata de eso, de aminorar los celos. Si somos capaces de imaginar eso, disminuyen.

    Abrazoooo.
    Rafael

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  17. Estupendo post, Juan Carlos. Creo que eres el que mejor ha captado el mensaje de Rafael. Me está sorprendido la cantidad de prejuicios y rigideces que se están vertiendo aquí, en este foro que pienso que es un espacio de libertad y de crecimiento personal.

    Manuel

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  18. No dejamos de decir y de leer en terapia racional que sólo necesitamos comer, beber y cobijo ante inclemencias del tiempo y, ante la posibilidad, de no tener una pareja en exclusividad, estamos denostando el principio fundamental de la no necesititis. Si nos tomamos esto en serio no debemos quedarnos en el mero folklorismo.

    Manuel

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  19. El que las necesidades vitales sean muy pocas, no quiere decir que debas tragarte insectos o gusanos crudos porque hay tribus que lo hacen. Son cuestiones distintas.

    No necesitas pareja, pero puedes tener un sistema de valores. Si la potencial pareja no entra dentro de tu visión de la vida, la excluyes y no pasa nada. No es una catástrofe.

    El problema está en el sufrimiento que te genere la situación y no tus valores en sí mismos.

    El sufrimiento no te lo genera que creas en la fidelidad, la monogamia,..(valores), sino el catastrofismo y las exigencias dogmáticas que apliques a la situación. Sufres porque consideras que tú pareja o la persona que te gusta "debería absolutamente" comportarse de determinada manera y que es catastrófico si no es así. Eso es lo que debes trabajar y no tus valores de fidelidad.

    Aquí hay dos debates distintos que se mezclan:

    1- El sufrimiento que se genera por creencias catastrofistas y dogmáticas acerca de cómo debería comportarse la gente o cómo debería construirse la sociedad a nivel sexual y familiar.

    2-Los valores propiamente dichos acerca del tema sexual, familiar y social.

    El sufrimiento psicológico lo puede generar cualquier sistema de valores, incluido el promiscuo-polígamo.

    Al mezclar lo uno con lo otro, nos quieren vender gato por liebre (o caballo por vaca). Y no cuela... : -)

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  20. Estoy de acuerdo contigo. En realidad es lo que he pretendido expresar con menos acierto que tú. Personalmente quiero seguir con mi pareja todo el tiempo que pueda y que sigamos en exclusividad. Pero esto no es óbice para que respete otros planteamientos vitales como el sistema de valores de los mosuos.
    De la misma manera que, sabiendo que podría vivir bien sin pareja, prefiero mantenerla, puedo convivir con sistemas de ver las cosas tan respetables y elegibles como los que yo prefiero.

    Manuel

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