jueves, 13 de septiembre de 2012

NICOLA, EL FICHAJE DEL AÑO

Hace muchos años, tuve la oportunidad de pasar un año en Inglaterra como estudiante Erasmus (fui el segundo año de existencia del programa; nadie sabía bien en qué consistía, ni los profesores).


Fue un año maravilloso en la Universidad de Reading, a una hora de Londres. Imaginaos: grandes parques, lagos y residencias universitarias antiguas en un campus paradisiaco todo lleno de estudiantes de todos los continentes.
En mi residencia, St Andrews Hall, enseguida formamos un grupo de amigos fantástico: Tomoe (japonesa), Oscar (español), Luigi (Italiano), Miki (Finladés), etc. Uno de esos grupos de personas inteligentes, cariñosas, divertidas que convierten la vida en algo apasionante. De hecho, vivíamos juntos porque cada uno tenía su habitación, pero todo lo demás lo hacíamos juntos en las instalaciones de la residencia: el pub, la biblioteca, el comedor... Además, no parábamos de viajar por Inglaterra y Europa a la más mínima oportunidad.


Pero, a medio curso, apareció un chico nuevo en St. Andrews: era Nicola, un francés grandote y bien parecido, con un montón de cajas encima. Resulta que su novia, con la que había acudido a estudiar, le había abandonado por otro. En las cajas, llevaba todo los enseres de su vida en común en una casa en el campus.


Conocimos sólo de refilón a Nicola porque se pasaba las horas en su habitación, fumando y escuchando música... Estaba deprimido. Hasta que un día, me tropecé con él por unas escaleras y le dije:


- Oye, amigo; te quiero ver en las comidas con nosotros todos los días. ¡Queremos conocerte!


Y el bueno de Nicola me hizo caso. Apareció y enseguida se integró. Al poco tiempo, había superado el trauma y estaba disfrutando de nuestro año en Inglaterra como el que más. Muchas veces, a lo largo de los años (han pasado 20 desde entonces), me recuerda Nicola lo agradecido que está de aquel encuentro nuestro.


¿Por qué cuento esta historia aquí?


Para ilustrar que lo que las personas queremos de otras personas es... "ellos", a secas... con sus fallos, sus problemas, sus incapacidades... Nicola no estaba bien cuando se unió a nuestro grupo, pero el grupo no tenía ningún problema con ello: es más, éramos nosotros los que íbamos a sacarle de sus neuras. Nos sobraban fuerzas para ello y para nosotros era algo hermoso. Ayudar a Nicola a levantar el ánimo nos resultaba una empresa maravillosa que nos unía todavía más. ¡Que acentuaba nuestros valores de amor mútuo constante y apoyo!


Ya digo, en poco tiempo, Nicola se recuperó y se mostró como un componente esencial de nuestro grupo: inteligente, gran deportista, un viajero experimentado, un fiestero estupendo... ¡Hicimos fácilmente el milagro! ¡Y nuestro grupo ganó a su vez en fortaleza y ganas de vivir! ¡Demostramos que juntos éramos los méjores médicos y sanadores del planeta!


Y es que la fortaleza del ser humano está en su capacidad de amar, de colaborar, de producirse felicidad mediante la alegría de compartir: no en el hecho de ser "guapos", "listos", "capaces", etc., etc. Esas cualidades son minucias en comparación con la gran arma de construcción masiva que es la aceptación incondicional.


Además, todas esas cualidades. la belleza, la inteligencia, cuando aparecen de verdad, cuando se aprecian bien, es cuando se basan en el amor por los demás y por la vida. Son producto de ello.


Últimamente, he tenido varios pacientes que no tienen claro este concepto y les surge la hiper-exigencia personal de ser guapos, listos, capaces... Y hemos debatido acerca de ello y les he contado la historia de Nicola, el deprimido que se convirtió en uno de mis mejores amigos.


Si cambiamos el chip, si dirigimos nuestro timón hacia los valores plenamente humanos: la amistad, el amor, la solidaridad, compartir... nos sacaremos de un plumazo toda una familia de neuras relacionadas con la competitividad que sólo hacen que atormentarnos.


Busquemos esos valores, cultivémoslos a partir de ahora, hagámoslos fundamento de nuestra personalidad: y empezaremos a sanar dúlcemente. Empezaremos a vivir de forma plena de verdad.


Abrazo bien amistoso a todos!!!
Rafael

20 comentarios:

  1. Seguramente Nicola no tenía ningunas ganas de ir a comer con vosotros el primer día que tú se lo dijiste... Sin embargo se esforzó y ese fue el primer paso para su recuperación que además le dio pie a conocer a unos amigos fantásticos!!
    El cambio no es mágico y requiere un esfuercito por nuestra parte, Nicola lo hizo estupendamente, se esforzó y eso le permitió salir de su tristeza y disfrutar de ese año tan chulo!!

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  2. Me encantan vuestros comentarios... son mi serotonina...El año pasado tomaba antidepresivos y este año tu libro es "mi pastilla" espero poder superar mi situación... no terrible como pensaba... pero si un poco mala...
    Un saludo.

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  3. Bonita historia y bonita reflexión, Rafael. Te sigo desde hace algún tiempo, desde que leí El arte de no amargarse la vida. Soy docente y he de decirte que eres muy didáctico en tus explicaciones y eso no es fácil. Gracias por ayudar a los demás y por hacerlo de forma sencilla.

    Un abrazo.

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  4. Una historia bonita. Abrir los ojos y ver lo que nos rodea, cuando alguien cercano necesita un empujoncito, aunque finalmente el trabajo interno es cuestión de cada uno, el saber que no eres invisible ayuda mucho. Un abrazo!

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  5. Venga!!
    Ponte las pilas perseverando en la idea de que ¡tenemos todo para estar muy bien! En esta historia vemos que los valores de ser "guapo", "listo", etc. no cuentan en absoluto... Los valores de la amistad, la solidaridad, el amor y la protección mútua, lo son todo. Así que: al carajo con esos defectos!

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  6. me la paso leyendo y re leyendo el arte de no amargarse la vida, Gracias por tus escritos, ahora me dedico a contagiar a los que me rodean para no ser la única que practica!!! desde San Juan Argentina un afectuoso abrazo!!!

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  7. Hola Rafael!
    molt bo l'article, per cert has de mirar si tens una estona la Contra d'avui:
    http://www.lavanguardia.com/lacontra/20120913/54350265869/la-contra-nicholas-tarrier.html

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  8. Eres un crack rafa!! vas a llegar a ser mejor terapeuta que el gran Albert Ellis, el discípulo superará al maestro jeje, un abrazo a todos!!

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  9. Por cierto Rafa cuando nos vas a visitar a los madrileños?!?! al final me vas a hacer ir a Barcelona a conocerte jeje

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  10. Pues me encantaría volver porque tengo súper buenos amigos allí; mi amigo Fernando y Lucía Extebarría, que es una chica genial! A ver si hacia octubre puedo dar una charla.

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  11. Hola Rafael, hace tiempo que te sigo... He leído tu libro.. y cuando leo tus post.. pienso que están muy bien... pero me parecen un poco utópicos.. por qué?? quizá porque la vida me ha enseñado que nada es tan bonito ni tan perfecto.. que hay que luchar y muchas veces no hay recompensa, Que cuando llegas nuevo a un sitio y estás deprimido.. no es corriente que vengan a sacarte de tu letargo porque cada uno va a la suya y le interesan poco las cosas de los demás..
    En fin, yo seguiré leyéndote porque creo que debo intentar encontrar el motivo por el que el resto de tus seguidores te entienden tan bien y yo no...
    Gracias por tus post.

    Bego.

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  12. Hola, Bego!
    Con la historia de Nicola intento expresar que lo que mola es la amistad, el amor, la colaboración y no la belleza, la capacidad, etc.
    Nosotros hicimos un grupo maravilloso porque manejábamos esos valores y la pasamos en grande. Yo creo que no se puede estar más feliz que como estuvimos en esa época. Por eso, les digo a mis pacientes que se fijan demasiado en esos atributos externos que los abandonen por otros muuuchos mejores.
    ¿Que ahora mismo puedas desarrollar esas amistades y relaciones?, quizás no, pero pongámonos enesa línea y no en la de ser guapo, listo o capaz para ser feliz...
    Abrazo!!!
    Rafael

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  13. Como se le puede hacer entender a un chico de 17 años que se olvide de esa hiper-exigencia personal, para que pueda tener relaciones fluidas con los demás y no le genere ansiedad el estar siempre perfecto con todos. ¿Se le pasará con la edad?, o simplemente es precisamente una falta de madurez.

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  14. Pues habría que ir transmitiéndole conceptos racionales, con calma, paciencia y, si se puede, con humor y amor. Nada más: la filosofía hace efecto poco a poco y, cuando se dé cuenta, ya estará sintiendo en consonancia...
    Abrazo!!
    Rafael

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  15. Si mis compis de la UAB leyeran, asimilaran y realmente cambiaran !!!! Entenderían que aunque no hable catalán perfectamente pero me esfuerzo, que aunque no nací aquí pero me siento de aquí ... Entonces entenderían que se están perdiendo de conocerme y privandome a mi del placer de conocerles, que soy capaz de dar amor y recibirlo.
    Creo que España aun no esta preparada para la experiencia enriquecedora de saber ver que tu país es el planeta !!!!!!

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  16. No te ayudaría si te diese la razón.
    Creo que eres tú la que terribilizas... venga: gánatelos de todas formas... Todos tenemos prejuicios: tú también... pero se deshacen con simpatía y ganas de pasarlo bien!!!
    Venga!!
    Rafael

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  17. Hola, yo también fui Erasmus en La Uni Readng viví en Childs Hall en el año 2002/03...

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  18. Hola, Unai.
    Qué bueno!! Me acuerdo de Childs! Yo estuve en 1991-92. Jeje, soy más viejo.
    Rafael

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