miércoles, 26 de diciembre de 2012

Certificado de tolerancia al mal-rollo (adelanto del nuevo libro)

mal rolloA lo largo de las páginas que hemos visto ya, hemos descrito a nuestras amigas las “neuras”. Ya las comprendemos. Sabemos cómo se originan y cómo las mantenemos. También hemos empezado a aprender a combatirlas.

Hemos visto que los seres humanos, cuando nos adentramos en una fase neurótica, nos volvemos ultra exigentes. De hecho, ésa podría ser una buena definición de neurosis: volverse demasiado demandante con uno mismo, con los demás y con el mundo. A eso también lo llamamos “no-lo-puedo-soportitis”. Nos quejamos y nos lamentamos por muchas cosas. Por ejemplo: “No tengo pareja, ¡joder!, soy un desastre y mi vida da pena!”.

En esos momentos, parecemos uno de esos judíos ultra-ortodoxos que se ven en las imágenes de Jerusalén con esos sobreros negros y el pelo en tirabuzones. ¡Alzamos la Biblia y la dejamos caer sobre nuestra propia cabeza!

Ese machacarse a uno mismo, llorar y ver las cosas realmente negras es la madre del cordero. No nos damos cuenta de que lo hacemos, pero vive Dios que es así. Cuando cambiamos nuestra filosofía de vida y no nos permitimos ese auto-diálogo criminal, gradualmente, vamos recuperando la fortaleza.

Pero en este capítulo vamos a estudiar una queja más aguda, todavía más definitoria de la neurosis. Digamos que se trata de una queja especial, más elevada, que complica el asunto y que sólo los psicólogos más experimentados suelen captar y solventar. Y es propia de las personas que están en un periodo más negro. La llamo “la reina de las neuras”.

Se trata de quejarse no porque nos pasa esto o lo otro, no porque “me faltan tetas” o porque “tartamudeo”… sino por el propio hecho de “estar mal”. Esto es, quejarse de sufrir psicológicamente: de estar triste o ansioso. La persona, por ejemplo, se levanta así por la mañana, quizás sin ninguna causa detonante, y el malestar continúa durante todo el día o incluso crece. ¡Qué rollo tener que trabajar así! o, peor todavía, tener que pasar el rato con la familia: sonreír, seguir conversaciones, aparentar buen ánimo.

Se trata de un lamento peculiar porque:

a) No hace referencia a algo externo que, en principio, podría ser directamente resoluble como “estar solo”, “estar gorda”. ¡No podemos trabajar para cambiarlo! Simplemente, estamos mal porque nuestro maldito cerebro no funciona como debería y ni siquiera los psicofármacos lo remedian.

b) Existe la creencia irracional de que las personas “normales” no tienen esos bajones sin razón con lo cual, somos unos frikies insoportables por tenerlos.

Una paciente llamada Laura, joven médica, inteligente y divertida, lo describía así en su diario:

“Hoy tengo que ir a comer con mis padres y no tengo ninguna ganas de ir. Lo que sucede es que no estoy bien y todo me cuesta más en esos momentos. Estoy irritable, negativa, ansiosa y con este bajón, ¿cómo voy a hacer el papelón en casa? ¡Demonios, no soy una persona normal! ¡Tener esto es la peor enfermedad que hay porque no puedo interactuar con los demás! Cuando tenga novio, ¿cómo diablos voy a estar con él con estos bajones si sólo me apetece encerrarme en mi habitación y no hacer nada? ¡No voy a poder tener pareja! ¿Qué va ser de mi vida?”


La descripción continuaba varios párrafos más con ese pronóstico tan negro. Claramente, terribilizaba sobre el propio malestar. Cuando lo repasamos días más tarde, en la consulta, Laura reconoció que exageró:

- Laura sí era una persona “normal”, aunque por ahora tuviese esos bajones de vez en cuando. Tres de cada diez personas los tienen. Por lo tanto, se trata de un fenómeno bastante corriente. Desde un punto de vista objetivo, nos guste o no, nuestra sociedad es así en la actualidad y haremos bien en acostumbrarnos a eso porque la tendencia no va la baja sino todo lo contrario. La normalidad, cada vez más, es esa: el ser humano moderno es culto, pero neurótico.

- Llegué a conocer bien a Laura y os puedo decir que era una persona maravillosa. Personalmente, ¡me encantaba! Era una profesional fantástica, muy divertida y tenía mil virtudes al margen de esas “neuras”. ¿Cómo podía decir que no iba a poder mantener a una pareja? De hecho, era una chica a la que no faltaban pretendientes y a lo largo de la terapia empezó a salir con un chico que prácticamente la idolatraba. ¡Sí, incluso con sus neuras!

- Por medio de los registros que hacía Laura para la terapia, pudimos comprobar que Laura sólo tenía algunos días malos. La mayor parte de la semana estaba mucho mejor y en esos momentos, era una persona deliciosa, divertida que hacía felices a los demás.

En definitiva, el malestar de Laura no era tan malo como ella se decía en esos momentos. Esa terribilitis en la que incurría por encontrarse mal a nivel psicológico sólo hacía que amplificar el malestar psicológico y hacerlo durar mucho más tiempo del razonable.

Si conseguimos tener una mirada más objetiva y racional de esos momentos, dejaremos de verlos como “insoportables” para darnos cuenta de que no son tan malos. Son un poco desagradables, pero no más que tener migrañas o artritis. Con esas dolencias podemos ser felices, podemos mejorar nuestra vida y hacerla maravillosa en muchísimos aspectos. ¡Por supuesto que sí!

Laura aprendió a que, en los momentos de depre o de ansiedad, podía:

- Trabajar y avanzar en proyectos de investigación apasionantes en los que estaba metida. Sí, con el malestar a cuestas podía ir a su despacho, abrir el ordenador y dedicar una jornada de trabajo extra larga. ¡Total, ya que no podía disfrutar mucho de los placeres de la vida en esos momentos, mejor dedicarse a hacer algo útil! Al día siguiente o a la semana siguiente se alegraría mucho del progreso.

- Podía acudir a las reuniones familiares. ¡Claro que sí! Se tenía que esforzar más, pero podía cumplir suficientemente y, de hecho, muchas veces, se olvidaba de su malestar y se sentía un poco aliviada.

- Hacer deporte. En esos momentos, especialmente si estaba un poco ansiosa, la mayor excitación nerviosa le daba mayores fuerzas para el jogging.


En definitiva, podemos decir que los seres humanos nos hacemos realmente fuertes cuando desarrollamos esta tolerancia al malestar psicológico. Tanto es así que yo les digo últimamente a mis pacientes que se tienen que ganar un “certificado de tolerancia al mal-rollo psicológico”. Con una hoja de papel apaisada, después de alguna práctica, dibujamos un título que dice:

El presente certificado acredita a:
Doña Laura Martínez Martínez con el título de tolerante al mal-rollo psicológico porque esos momentos son bastante corrientes en nuestros días y en nuestra sociedad. Porque no definen a la totalidad de la persona, sino solo a una parte. Y porque podemos hacer cosas útiles entre tanto que nos beneficiarán a todos.
Firma:
La Universidad de la Vida


Abrazos navideños!!
Rafael

martes, 25 de diciembre de 2012

REFLEXIONES DE MÓNICA: FELICES FIESTAS RACIONALES A TODOS LOS AMIGOS DE EDF!!!

Hola a todos, lo primero que queremos desearos desde EDF son unas muy felices fiestas!!!, bueno más bien unas fiestas de Navidad muy racionales, je, je...

Hoy es un día muy bonito para trabajar nuestras exigencias de una manera diferente. Como ya hemos comentado muchas veces nosotros somos los únicos responsables de nuestro malestar emocional, es lo que estamos pensando en ese momento, nuestro diálogo interno, el único responsable de nuestras emociones.

También hemos hablado en muchas ocasiones que cuando tenemos emociones que nos bloquean es debido a que en nuestro diálogo interno tenemos algunas exigencias, exigencias que estaría bien explorar y cuestionar puesto que son del todo irracionales.

Lo interesante es que con las herramientas que estamos aprendiendo nosotros aprendamos a cuestionar, nosotros mismos, nuestras propias exigencias.

Para identificar nuestras exigencias va muy bien el siguiente esquema: Como siempre nos dice Rafael todas las exigencias, todas las creencias irracionales las podemos clasificar en tres grupos:

- Debo hacer las cosas bien: No debo fallar. Debo hacerlo todo bien... Es la exigencia del éxito.

- Los demás deben tratarme como yo quiero: Los demás me deben tratar bien. Debo ser aceptado por la gente. Debo ser amado...Es la exigencia de la aprobación.

- Las cosas en la vida me deben ir bien: Las cosas tienen que ser fáciles y no me tienen que incomodar... Es la exigencia de la comodidad.

Nuestras emociones no las tenemos que cuestionar, son las que son y hay que aceptarlas, eso sí, hay emociones sanas e insanas. Lo que sí que tenemos que aprender a cuestionar son nuestros pensamientos. Decimos que hay emociones insanas porque nos bloquean y, hacen que nos boicoteemos nosotros mismos nuestros propios objetivos. El enfado, los nervios, la tristeza son emociones sanas, la rabia, la ira, la depresión o la ansiedad son insanas.

Por tanto, cuando experimentemos una emoción insana vamos a pararnos y vamos a hacer el esfuerzo de ver que es lo que estamos pensando en ese momento y en cuál de estos tres grupos de exigencias/creencias irracionales que hemos dicho antes, estamos.

Nuestras exigencias las tenemos que transformar en preferencias y las emociones entonces nos acompañaran.

Otro esquema importante a tener en cuenta es el siguiente: Cuando tenemos exigencias sean del grupo que sean también podemos ir un poco más allá y plantearnos lo siguiente: Cuando tenemos una creencia irracional, una exigencia ¿qué pensamos, qué nos decimos a nosotros mismos si no se cumple esa exigencia?

Podemos hacer igualmente tres grupos:

- Si no se cumple mi exigencia me condeno o condeno a los demás: "Soy un inútil" o "los demás son inútiles". Importante trabajar entonces la autoaceptación incondicional de uno mismo y de los demás. Aquí como sentimiento suele aparecer la culpa que no es más que rabia sobre uno mismo o bien la rabia hacia los demás, la condena a los demás.

- Si no se cumple mi exigencia "NO puedo soportarlo". Es la baja tolerancia a la frustración. No es verdad, porque si no pudiéramos soportarlo nos moriríamos y eso no suele ocurrir, ¿verdad? Cuando tenemos una baja tolerancia a la frustración es muy frecuente que como conductas pospongamos o evitemos situaciones y como emociones suelen aparecer la ira y la culpa.

- Si no se cumple mi exigencia "ES TERRIBLE". Pero seguro que hay cosas más terribles que las nuestras...

A veces tenemos exigencias de los diferentes grupos y también si no se cumplen esas exigencias podemos decirnos a nosotros mismos más de una cosa: Condenarnos a nosotros mismos, catastrofizar, decirnos que no podemos soportarlo... es decir que a veces tenemos cosas de todos los grupos que hemos explicado.

En el caso de la ansiedad por ejemplo podemos tener ansiedad por tener a la vez la exigencia del éxito y de la aprobación: Debo ser perfecto y competente para conseguir la aprobación de los demás. Es la ansiedad del ego.

O bien podemos tener más ansiedad situacional: Más ligada con la exigencia de la comodidad: Las cosas deben ser fáciles porque si no, no lo puedo soportar.

O tener los dos tipos de ansiedades. Todo depende de las exigencias que tengamos cada uno y de nuestra rigidez.

Conclusión, ante una emoción insana, aprender a pararnos y descubrir nuestra exigencia y las consecuencias que tiene para nosotros el que no se cumpla esa exigencia. Pensar en estos grupos de los que hemos hablado, porque nos será más fácil identificar nuestras rigideces. A partir de identificar nuestro problemilla, transformar esas exigencias en preferencias a partir de argumentos lógicos que poco a poco estamos aprendiendo y valorar y analizar, las consecuencias que tienen para nosotros el que no se cumplan esas exigencias pero de manera realista.

Un beso a todos y FELIZ NAVIDAD!!

Mónica

sábado, 22 de diciembre de 2012

REFLEXIONES DE MÓNICA: CRÓNICA DE LA ÚLTIMA TERTULIA DE MÁLAGA

Hola a todos, os paso el resumen de la última tertulia que tuvo lugar en Málaga el pasado 12 de diciembre. Dar las gracias a nuestros queridos amigos Miguel, Marilú y Verónica que son unos cracks y que son los que están al frente de todo este proyecto. Todavía no hay fecha para la siguiente tertulia de Málaga pero en breve la tendremos y ya os informaremos puntualmente.

Os dejo con el resumen que nos han preparado nuestros amigos.

Un beso a todos y muchas gracias por vuestro trabajo y por vuestro entusiasmo!!!!

Mónica

RESUMEN 2ª TERTULIA ESCUELA DE FELICIDAD EN MÁLAGA

"Las Fechas navideñas"

Esta segunda tertulia nos ha confirmado que el trabajo de cada uno, puesto en común, genera aún mayor valor; el pasado miércoles 12 de diciembre celebramos nuestra segunda tertulia de Escuela de felicidad con un tema “calentito” para estas fechas: la Navidad y cómo la disfrutamos, sufrimos, o vivimos.

Continuamos con la dinámica de la primera tertulia y nos sentamos todos alrededor de una mesa, lo que generó cercanía y un mayor vínculo entre todos; además, en las salas contiguas del edificio de la Junta de Distrito donde estábamos se celebraba esa tarde el cierre de las actividades de 2012, y se preparaba una estupenda merienda para un montón de gente… ¡más acogedor imposible!.

Arrancamos con la lectura de "La maldita cena de Navidad" (página 182 del libro El arte de no amargarse la vida, edición 12ª).

Comentamos acerca de ideas como:

•En ocasiones y para algunas personas la Navidad se presenta como días de obligaciones.
•¿Qué sentido tiene para la familia, para cada persona, la Navidad?
•Recordamos la Navidad desde la perspectiva de la niñez.
•Es preferible desprenderse de las obligaciones y ver que podemos pasar un rato agradable.
•¿Qué nos afecta y porqué nos afecta?
•Detrás de un pensamiento siempre hay una emoción, por lo que es recomendable trabajar nuestra forma de pensar, de esta forma viviremos con más calma.

Volvimos a comentar acerca de la importancia de aprender a pensar bien porque eso nos hace emocionalmente fuertes, y debatimos sobre una idea que es fundamental para “no amargarnos la vida”, ni en Navidad ni nunca: no nos afecta lo que nos sucede, sino lo que pensamos sobre lo que nos sucede.

Se comentaron experiencias personales tanto vinculadas con la Navidad como con el ámbito laboral o el familiar fuera de estas fechas, encontrando coincidencias por lo que se trata de cómo vemos las cosas y nos afectan según nuestro diálogo interior, más que de las fechas concretas.

La Navidad se recuerda con alegría en muchas ocasiones porque nos recordamos de niños y sentíamos felicidad; pero la realidad es que en aquella época ya éramos felices, no era la Navidad, sino nuestra forma de ver y entender las cosas de la vida; no vale “querer regresar” a aquellos tiempos, lo que debe motivarnos es encontrar de nuevo la felicidad para disfrutar ahora, sea en Navidad o en cualquier otra fecha, y eso se logra desde dentro de nosotros mismos, con la evaluación correcta y con el diálogo interior adecuado.

Coincidimos en que lo que más nos presiona en estas fechas son las obligaciones, por lo que hay que desprenderse de todo aquello que directamente no deseamos ni nos viene bien; si decidimos compartir alguna celebración, que sea porque queremos y participando con alegría, de forma positiva. Igualmente hemos de aprender a decir “no” cuando una obligación sabemos que nos va a perjudicar o sencillamente no queremos aceptarla. Debemos aprender a ser felices cada uno y si queremos, compartir esa felicidad con los demás, pero sin caer en “deber” ser felices por los demás.

También se trató la Navidad desde el punto de vista de su significado religioso, sobre su actual “sentido comercial”, y sobre lo que cada uno quería para sí en estas fechas. ¡Y se nos pasó la hora y media en un suspiro!.

Esta segunda tertulia ha sido también muy gratificante, con una participación muy cercana y activa, y por si fuese poco, estábamos “ambientados” por los villancicos de una pastoral con sus panderetas en la sala contigua.

Propusimos comenzar el nuevo año con el capítulo 1 de El arte de no amargarse la vida, “Transformarse es posible”, y quedamos en comunicar la fecha (será en enero, pero no sabemos el día aún) y el lugar una vez nos lo concreten desde la Junta de Distrito, esperando sea en el mismo lugar que hasta ahora, y si no es así, ¡no pasará nada!, buscaremos otro espacio.

Para terminar, realizamos un sencillo ejercicio de inteligencia emocional con el que aprendimos a serenar y alegrar nuestra mente en momentos en que “el bajón emocional” o el enfado nos acecha.

Un auténtico placer haber compartido esta nueva tertulia, y animar a todos a trabajar en estas próximas semanas para no amargarnos más ni las navidades ni la vida. ¡Felices fiestas desde Málaga!.

sábado, 15 de diciembre de 2012

REFLEXIONES DE MÓNICA: CRÓNICA DE LA ÚLTIMA TERTULIA EN BARCELONA

Hola a todos, el pasado martes tuvimos nuestra tertulia en Barcelona, creo que es la tertulia más bonita que hemos tenido. Primero acabamos el capítulo 11 del libro de Rafael y luego trabajamos la autoaceptación incondicional, estuvimos casi las dos horas trabajando y luego preparamos una fiestuqui de despedida del Centro Cívico Les Corts y de bienvenida de la Navidad.

Dar especialmente las gracias a Carlos que es nuestro fotógrafo oficial, un lujazo!! y a nuestra querida Nisa que vino desde Canarias y que tuvimos el placer de conocer y también a David que hizo unas aportaciones súper interesantes.

Nos han tratado muy bien en el Centro Cívico Les Corts y les estamos muy agradecidos, ahora volvemos a Can Déu a nuestros orígenes!! Empezamos en el bar y ahora nos ceden la sala grande, estamos muy contentos.

Os recuerdo que la próxima tertulia será el día 21 de enero a las 19:00 horas en el Centro Cívico Can Déu, por medio están las Navidades, una oportunidad genial para practicar lo que estamos aprendiendo. Por cierto, de esta tertulia no hay apuntes porque trabajamos los que habíamos dado en la tertulia anterior y el post de la autoaceptación incondicional del blog.

Un beso a todos y gracias por vuestra participación.

Mónica

jueves, 13 de diciembre de 2012

NUEVO PROGRAMA DE TVE: MODELOS DE FORTALEZA

tv2Un nuevo programa de TVE: "Mis modelos de fortaleza"

http://www.rtve.es/alacarta/videos/para-todos-la-2/para-todos-2-entrevista-rafael-santandreu-ejemplos-superacion/1611476/

Abrazo!!
Rafael

domingo, 9 de diciembre de 2012

REFLEXIONES DE MÓNICA: LA AUTOACEPTACIÓN INCONDICIONAL DE UNO MISMO

Hola a todos, hoy para empezar bien el día vamos a poner un listado de pensamientos que nos ayudarán a aumentar la autoaceptación incondicional de uno mismo. La autoaceptación incondicional de uno mismo y de los demás son uno de los pilares básicos de nuestra fortaleza emocional, ahí van esos pensamientos.

Un beso a todos.

Mónica

- Yo no soy una mala persona cuando actúo mal, yo soy una persona que ha actuado mal.
- Yo no soy una buena persona cuando actúo bien y logro cosas, yo soy una persona que ha actuado bien y logro cosas.
- Puedo aceptarme a mí mismo incluso si gano, pierdo o empato.
- Estaría mejor si no me definiera por completo por mi comportamiento, ni por las opiniones de los demás, ni por cualquier otra cosa.
- Yo soy un ser humano valioso porque sí, falible pero valioso, no tengo la necesidad de probarme nada.
- Yo no soy un tonto por actuar tontamente.
- Tengo muchos defectos y puedo trabajar en la corrección de ellos sin culparme, condenarme, o maldecirme a mí mismo por tenerlos.
- Corrección, sí!!!!. Condena no!!!
- Yo no puedo probarme ni como buena ni como mala persona. Lo más inteligente que puedo hacer es simplemente, aceptarme a mí mismo.
- Yo no me convierto en un gusano por haber actuado mal.
- No puedo "probar" el valor humano o falta de valor por las actuaciones. Es mejor que no trate de hacer lo imposible.
- Aceptarme a mí mismo como ser humano, es mejor que tratar de probarme como un "superhombre" o calificarme como un "subhumano".
- Puedo detallar mis debilidades, mis desventajas, mis fallos, sin juzgarme o definirme por ellos.
- Yo no soy estúpido por actuar estúpidamente. Más bien, soy un ser humano falible que, a veces, tiene un comportamiento estúpido.
- Puedo juzgar mi comportamiento sin juzgarme a mí mismo.
- Puedo reprender mi comportamiento sin reprenderme a mí mismo.
- Puedo alabar mi comportamiento sin alabarme a mí mismo.
- Es bueno evaluar conductas no la totalidad de la persona. Cuidado con la utilización del verbo "ser".
- Puedo reconocer mis errores y ser responsable de ellos, pero sin reproches a mi mismo por efectuarlos.
- Es muy absurdo el juzgarme favorablemente, por mis logros y por lo bien que impresiono a los demás, por ganarme su aprobación.
- Igualmente, es una tontería juzgarme desfavorablemente por no ser capaz de impresionar a los demás, por su rechazo o por no alcanzar un logro.
- Yo no soy un ignorante al actuar por ignorancia.
- Cuando, absurdamente, me autoreprocho, sería interesante no reprocharme por haberme autoreprochado.
- Nos convertiremos en personas emocionalmente más fuertes si no dejamos nuestra autoaceptación a merced de nuestras circunstancias.
- Puedo aceptarme, sin importar las evaluaciones de los demás, en lugar de que los demás jueguen conmigo con sus comentarios.
- Puedo, a veces, necesitar y depender de otros para hacer cosas prácticas, pero no tengo que depender de nadie emocionalmente para aceptarme a mí mismo: ¡La dependencia práctica es un hecho!, ¡La dependencia emocional es una ficción!
- No dependo de nada ni nadie para aceptarme a mí mismo.
- Puedo ser bueno en alguna habilidad, tener éxito, pero el éxito no me hace mejor persona.
- Puede que no me guste fallar, pero el fallar no me hace una peor persona.

viernes, 7 de diciembre de 2012

REFLEXIONES DE MÓNICA: EL MIÉRCOLES DÍA 12 DE DICIEMBRE TERTULIA EN MÁLAGA.

Hola a todos, os informo que este próximo miércoles día 12 de diciembre nuestros amigos de Málaga tendrán su segunda tertulia. Os dejo con el cartel que han preparado para la misma.

Muchas gracias amigos de Málaga por vuestro entusiasmo y por vuestra espectacular organización.

Un beso,

Mónica


TERTULIA MÁLAGA DICIEMBRE 2012


1. Día y hora: MIÉRCOLES 12 NOVIEMBRE de 17:00H. A 18:30h.

2. Lugar: Distrito Centro (Edificio Mercado de la Merced) SALA IGUALDAD. Calle de la Merced nº1, 29012 Málaga
3. Si te pierdes llama al 952 13 47 40, SÓLO PARA PREGUNTAR LA DIRECCIÓN DEL SITIO. Este teléfono es de la conserjería del distrito, solo os pueden decir cómo llegar. No soliciteis información sobre la actividad, ya que son muchas y variadas las actividades que se realizan y desconocen la información.
4. Cualquier duda e información sobre la actividad escribenos a tertuliamalaga2012@gmail.com

NOTA: Como en la anterior tertulia, te pedimos que confirmes tu asistencia mandando un email a tertuliamalaga2012@gmail.com y nos digas también si te va a acompañar alguien más.

jueves, 6 de diciembre de 2012

REFLEXIONES DE MÓNICA: CRÓNICA DE LA ÚLTIMA EXCURSIÓN DEL GRUPO DETERTULIAS EN BARCELONA


El pasado domingo día 2 de diciembre hicimos una excursión por Collserola el grupo de tertulias de Barcelona. Fue un día estupendo en el que compartimos la naturaleza de manera racional. La verdad que fue un placer compartir este día con todos vosotros: Dolors, Carlos, Jordi, Marie France, Anna, Mercè, Luna, Neus, Gloria, Gerard y su mujer, Marga, Trini y nuestra guía fantástica María José que fue quien nos hizo de guía y quien nos organizó la excursión.

Dar las gracias también a Carlos por las fotos estupendas que nos hace siempre y por la felicitación de Navidad personalizada que nos ha mandado.

Un beso a todos chicos, hemos formado un grupo fantástico!

Mónica

REFLEXIONES DE MÓNICA: PRÓXIMO DÍA 11 DE DICIEMBRE TERTULIA EN BARCELONA

Tertulias - Escuela de la Felicidad - 1Hola a todos os informo que este próximo martes día 11 de diciembre tenemos otra de nuestras tertulias en Barcelona, acabaremos de trabajar el capítulo 11 de "El arte de no amargarse la vida" que no nos dió tiempo de acabar en la ultima tertulia y también si nos da tiempo trabajaremos el capítulo 12. Después haremos una pequeña merienda entre todos para despedirnos hasta después de Navidades. Esta tertulia será como siempre a las 19:15 en el Centro Cívico Les Corts, del carrer Dolors Masferrer 33, detrás del Corte Inglés de Diagonal.

Anunciaros también que nos despedimos del Centro Cívico Les Corts, las tertulias en el 2013 las haremos en el Centro Cívico Can Déu, volvemos a nuestros orígenes!!, la tertulia de enero en Barcelona será el día 21 a las 19:00 horas en Can Déu.

Un beso a todos y gracias por participar,

Mónica

REFLEXIONES DE MÓNICA: CRÓNICA DE LA TERTULIA DE MADRID DEL PASADO 3 DE DICIEMBRE.

Tertulias - Escuela de la Felicidad - 1Hola a todos, el pasado día 3 de diciembre tuvo lugar la segunda tertulia de Madrid con un éxito total, unas 15 personas, además de trabajar el capítulo 3 del libro de Rafael compartieron entre todos diferentes ideas y opiniones. Nuestra querida colaboradora Carmen nos ha hecho un resumen estupendo con el que os dejo a continuación.


Informaros para los interesados en las tertulias de Madrid, que la siguiente tal y como dice Carmen, será el próximo día 14 de enero a las 19:00 horas también en el café Viena.


Un beso a todos,


Mónica


RESUMEN DE LA TERTULIA DE EDF EN MADRID DEL PASADO 3 DE DICIEMBRE DE 2012


Me congratula decir que el pasado día 3 de diciembre tuvimos nuestra segunda tertulia en Madrid con un lleno total, incluso con algunos invitados que acudieron interesados en participar en estos encuentros y que ahora ya se nos unirán para la siguiente tertulia.


Con las presentaciones iniciales se nos fue bastante tiempo pero pudimos tratar el capítulo 3 “Basta de dramatizar” y leer algunas de su frases inspiradoras. Yo particularmente con este repaso por capítulos cada vez obtengo más información y datos nuevos que sin duda me ayudan y me animan.


Precisamente en el capítulo 3 Rafa nos descubre “la terribilitis”, esta palabra tan reveladora, para ello usa el ejemplo de una paciente que por el hecho de ser bajita era desgraciada, a pesar de tener una vida que podría decirse plena y el ejemplo del sordociego Paquito, quien a pesar de no poder oír, ni ver, ni hablar, optaba por ser feliz con su modo de vida. Qué distintos puntos de vista para valorar lo que nos ocurre, ¿no es cierto?.


Esto nos llevó a tratar el tema de que somos máquinas de evaluar según lo que Rafa llama “La línea de evaluación de las cosas de la vida”, lo sano es colocar los hechos que nos suceden en una valoración adecuada, que no nos trastornen indebidamente.


Así que leímos la frase que dice que hay quienes escogen “aprovechar su vida haciendo algo positivo hasta el mismo día de su muerte, suceda lo que suceda”. Podríamos tomar como ejemplo a Stephen Hawking.


En este capítulo se nos muestran los criterios para evaluar lo que nos sucede o podría suceder: criterios objetivos, con sana comparación, abiertos al mundo, constructivos, con una mínima conciencia filosófica.


Os detallo los puntos que tratamos en esta ocasión:


.- La importancia del lenguaje que usamos respecto a los acontecimientos.


.- Es preferible contrastar lo que nos dicen los demás según nuestro sistema de creencias racionales.


.-Tenemos grabadas ideas inconscientemente, lo cual nos produce reacciones automáticas, por ejemplo cuando vemos una culebra saltamos de pavor o de repulsa.


.- El trato que hemos recibido en la niñez nos condiciona mucho.


.- También nos influyen las presiones de otros, por ejemplo el jefe en el trabajo y el modo en que ejerce esa presión.


.- Para evitar influencias negativas mejor tender a la madurez y a la salud emocional.


.- Hay personas que nos quitan energía.


.- Hay personas que terribilizan para llamar la atención, un compañero de trabajo que todo lo que le pasa en el día es terrible, es horrible, no lo puede soportar!.


.-Reconocemos que tenemos creencias irracionales cuando ante una ruptura sentimental no somos capaces de sobreponernos en un tiempo prudencial, porque creemos en nuestro interior que necesitamos a alguien para ser feliz, exaltando a la pareja ausente y la idea del amor sentimental.


.- Hay tres grupos de ideas irracionales: el yo que tiene que ser perfecto, que los demás sean como yo quiero, que el universo vaya a mi favor.


Finalmente como dice Rafa en este capítulo para combatir la terribilitis hay que responderse a la siguiente pregunta: ¿en qué medida esto que me ha pasado (o me podría pasar) me impide llevar a cabo acciones valiosas por mí o por los demás?.


La próxima tertulia será el día 14 de enero a las 19:00 horas y trataremos el capítulo 4º de El arte de no amargarse la vida, “ Preferencias en vez de exigencias”.


Allí estaremos,


Carmen

sábado, 1 de diciembre de 2012

ENTREVISTA PARA CÍRCULO DE LECTORES

nueva edición2 ok, el arte de no amargarse la vidaQuien se amarga… ¿es porque quiere?
A nadie le gusta pasarlo mal. Lo que pasa es que no nos damos cuenta de que nos amargamos nosotros mismos. Por ejemplo, yo oigo que mucha gente dice algo así como: «¡Pepe me pone de los nervios!». Y yo les digo: «Eso no es posible. Lo que sucede es que tú te pones de los nervios al decirte que lo que hace Pepe es intolerable». Eres tú -con tu diálogo interno- quien se enfada, se estresa, se entristece… Darse cuenta de eso y ponerse las pilas para cambiarlo es la base de la terapia racional.


En tu libro dices que deseamos más de lo que necesitamos y que nos tomamos a la tremenda cosas sin importancia. ¿Cuál es el primer paso para evitar los dos extremos?
Darse cuenta a un nivel profundo que necesitamos muy poco para estar bien. El agua, la comida del día y un poco de techo para los días malos. Viviendo en el albergue público ya podríamos ser muy felices.


Nuestro equilibrio emocional, ¿está en horas bajas? ¿Puede decirse que, en cierto modo, somos una sociedad de quejicas?
¡Absolutamente! Nos quejamos todo el tiempo… No solo de presuntas desventajas materiales, sino también inmateriales: «¡Necesito tener amigos, novia, piso en propiedad… Y si no lo consigo, soy un maldito gusano!».


Durante la posguerra la gente se deprimía mucho menos. Aquella generación, ¿sabía algo que nosotros hemos olvidado?
Hasta los años setenta la gente era fuerte y sana. Hasta que se inventó el «usar y tirar», la superabundancia y el tamaño king size de las hamburguesas. La locura del «más es siempre mejor» se ha generalizado en los implantes de pecho y otros excesos. El último es la pretensión de vivir hasta los 150 años… Sí, hemos olvidado los términos humildad, sosiego, armonía, renuncia, naturalidad…


¿Qué nos da más miedo, la soledad o la crisis?
La soledad, sin duda. La gente tiene más miedo a la desaprobación y a quedarse sola que a nada más en el mundo, lo cual es una tontería porque a) es imposible quedarse completamente solo; b) la compañía está bien, pero hay cientos de otras gratificaciones. Cuando te das cuenta de ello en profundidad, el miedo a la soledad desaparece como por arte de magia: ¡qué liberación!


¿Tenemos que redefinir conceptos como éxito?
La palabra éxito está bien, aunque no hay que darle tanta importancia. El problema es la palabra fracaso. Esa sí que hay que hacerla desaparecer de los diccionarios… Fracasar significa «errar» con un tinte peyorativo, y yo no veo el problema a «errar». Fallar no tiene importancia, porque la vida es un juego: lo importante es participar, no fallar o acertar. Dentro de nada estaremos todos muertos… Por lo tanto, ¿quién dice que hay que acertar? ¿Para qué? Si lo único que necesitamos es un poco de agua y comida… ¿por qué iba a ser tan importante no fallar?


¿Qué es lo que más sobrevaloramos y lo que más infelices nos hace?
Lo más sobrevalorado es la pareja y lo que más infelices nos hace es la desaprobación de los demás (que nos denuesten, que nos falten el respeto…).


¿La pareja no es importante?
No mucho. Eso es un mito. El 50 % de las parejas modernas no aguantan diez años y solo el 25 % están juntas más de quince. Las parejas casi lo pasan más mal que bien. Un día de estos cambiaremos el sistema de «pareja monógama para toda la vida» y será un alivio para todos, incluidos los hijos.


Entre las creencias que nos inculcan desde pequeños, ¿cuál es la más dañina?
«Hay que ser responsable y cumplir con las obligaciones».


¿No hay que ser responsable?
Mucho menos de lo que nos enseñan. El motor del disfrute es enorme; el de la obligación, mediocre. Los niños deberían aprender a hacer las cosas por gusto y entender que el bien común es genial. Todo lo demás no sirve para nada: solo para volvernos seres miedosos y neuróticos. Si las personas no comprenden que hacer las cosas bien –pocas pero bien– es mejor, no es necesario que lo hagan… hacerlo de otra manera no serviría para nada bueno. De hecho, lo que nos iría muy bien es que la gente hiciese muchas menos cosas: que parasen de una vez…


No entiendo…
El matemático y filósofo Blaise Pascal dijo: «Todos los males de la humanidad proceden de la incapacidad del hombre para estar sentado en una silla sin hacer nada. Como no puede, la arma». Tanta obligación solo sirve para esquilmar el planeta.


¿Por qué tenemos tanto miedo al ridículo?
Porque tenemos la creencia irracional siguiente: «Necesito la aprobación de los demás». Sin embargo, si aprendemos que solo necesitamos la aprobación de unos pocos, la gente que tienes más cercana –y tampoco todo el tiempo–, pierdes ese miedo al ridículo. Yo tenía miedo a hablar en público y lo perdí completamente gracias a meterme en la cabeza esta idea. Cuando me convencí por activa y por pasiva de ello, simplemente el miedo desapareció.


¿Cómo convencernos de que es posible aprender a ser positivos?
Es que no tenemos que ser positivos, sino realistas. La realidad es que la vida es muy fácil, es un chollo porque necesitamos muy poco para estar bien. Y si sabemos ver las oportunidades, siempre encontraremos fabulosos proyectos y posibilidades de disfrute. Por otro lado, dramatizar, cabrearse y deprimirse no sirve para nada. Si tuviese ventajas, escribiría un libro aconsejando hacerlo, pero no es así.


¿La vida es más sencilla de lo que nos parece?
Sí, pero nos empeñamos en complicárnosla con exigencias irracionales. Y eso ya lo dijo Charles Darwin: «En todos los viajes que he hecho he comprobado que el destino del hombre es ser muy feliz, porque así son todas las especies que he estudiado. ¿Qué hacemos actualmente para no serlo? Vivir de forma antinatural». Esa forma artificial de vivir viene dada por nuestra tendencia a crear necesidades ficticias.


Aparte de la terapia cognitiva, ¿recomiendas prestar más atención a la filosofía oriental?
Es una de las bases de la terapia cognitiva; de modo que sí, la recomiendo. Todo lo relativo al budismo, al zen y al tao nos irá muy bien. Aunque el cristianismo bien entendido es una maravillosa guía de vida.


¿Algún consejo para disfrutar de la vida pase lo que pase?
Fijarte en el científico Stephen Hawking, del que describo su filosofía personal en mi libro. Él está en silla de ruedas desde hace más de treinta y cinco años y es uno de los mejores científicos del mundo y, sobre todo, es muy feliz. Cuando te estés amargando por algo, pregúntate: «¿qué me diría Hawking de mi adversidad?».