viernes, 23 de marzo de 2012

REFLEXIONES DE ANA: LAS TRES HORMIGAS

Tres hormigas iban por un camino, detrás de ellas las seguían otro grupo de hormigas cuando de pronto, las tres hormigas cayeron en un pozo profundo. Rápidamente el grupo de hormigas se acercó al borde del pozo y vió que en el fondo estaban sus tres compañeras intentando salir a  la superficie.

 

Pasó un buen  rato y no podían salir, aunque lo intentaban no llegaban arriba. Viendo que sufrían con tanto esfuerzo, las hormigas que estaban arriba les dijeron: No podemos ayudaros porque este pozo es muy profundo, nunca podréis salir, dejad de intentarlo porque moriréis de todas formas.

 

Dos de ellas asi lo hicieron y al cabo de unas horas murieron, sin embargo, la tercera siguió y siguió sin parar un momento... hasta que finalmente consiguió llegar y salir.

 

¿Por qué no se rindió y cedió a los consejos que le daban? No podía oírlas ella era sorda.

 

Un beso,

 

Ana

6 comentarios:

  1. confia mas en ti y no siempre en los consejos de los demas

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  2. A palabras 'de desánimo' oídos sordos.
    Rendirse no ha de ser nunca una opción.
    Gracias por este pequeño relato !!!!!!!!!!

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  3. "Evita a las personas negativas; siempre tienen un problema para cada solución". Y tambien en como dice Ana B, apostar más por las decisiones que uno mismo pueda tomar. Pensaré en ello.

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  4. Veo que el tener un problema, como no poder oir, agudiza los demás sentidos y consigues lo que te propones. Hacer oídos sordos a las trabas que otros ven en situaciones complicadas y mantenerte en tus propias convicciones...puede incluso salvarte la vida.

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  5. Es dificil confiar en uno mismo cuando a tu lado todo es negativo.Ese era mi caso hasta que un día decidí decirle a mi pareja (ahora expareja) todo lo que no habia dicho en catorce años..... le dió igual está sordo.

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  6. Esto deja claro que cada uno debe tomar sus propias decisiones y llevar las riendas de su vida sin dejarse influenciar por nada ni nadie, ya que somos únicos e irrepetibles, somos especiales así como lo es nuestra forma de ver las cosas. Debemos luchar por aquello que nos haga felices, y está en nuestra mano, siempre que lo hagamos sin lastimar a nadie ni avasallar a los demás.
    Aunque estemos equivocados, errar es bueno te da la oportunidad de aprender.

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