lunes, 13 de marzo de 2017

REFLEXIONES DE PILAR G. VADO: CARTA A MI MOSCA COJONERA

A continuación os dejo una carta que un paciente ha escrito a su ansiedad, a quien él, cariñosamente, denomina su “mosca cojonera”. Para él la ansiedad no es algo terrible contra lo que hay que luchar, sino más bien es una aliada, una amiga, una compañera de vida que, aunque resulta incómoda, tiene el único propósito de ayudarle a crecer.  

“En primer lugar, considero que tener o vivir con ansiedad es algo normal, un sentimiento o sensación habitual en nuestra sociedad actual. Ciertamente es insano, y sería deseable evitar su aparición y buscar los orígenes o focos de la misma, pero en ningún caso es algo terrible.
Sus síntomas, sobre todo físicos, pueden llegar a resultar algo incómodos y sería deseable no tenerlos, pero ello no me impide desarrollar una vida totalmente normal. Seguir disfrutando de los pequeños placeres que me ofrece la vida y la gente que me rodea, hacer cosas útiles en mi trabajo o fuera de él.

Y ahora que ya tenemos confianza te trataré de tú. Por supuesto que podré tomar una cerveza viendo deporte aunque tú estés ahí, por supuesto que podré tener una cena agradable y de risas con mis amigos y como no podré salir a dar un paseo y disfrutar de mi Madrid. Quizás si consigo que seas mi acompañante en estas andanzas, a ti te resulten aburridas y acabes decidiendo abandonarme.

Aunque tuviera que convivir contigo toda la vida tampoco sería terrible. A mi alrededor existen ejemplos de personas que van a convivir toda su vida con cosas mucho peores, con por ejemplo, mi amiga Sara y su doble amputación de piernas, el gran Stephen Hawking y su enfermedad ELA, Paolo Badano y su paraplejía, Enhamed y su ceguera; y no por ello pierden su valioso tiempo en estar lamentándose y quejándose.

Incluso en sus días peores aceptan lo que tienen, no con resignación, sino que reconocen lo mejor dentro de su adversidad y manifiestan lo poco que ayuda quedarse dentro de un bucle de quejas y lamentaciones que lejos de ayudar lo único que genera es más ansiedad, depresión, etc.

Doy gracias por vivir aún con aquellas cosas que me desagradan, como tú. A partir de ahora te voy a llamar "mosca cojonera". Quizás a ti no te guste este nombre, me da igual, quizás me cueste quitarte de encima, quizás cuando piense que ya no estás reaparezcas o quizás quién sabe nunca conseguiré escapar de ti; pero tengo que aceptar que eres parte de mi vida, que fluyes como mi sangre o como mis impulsos nerviosos, y al estar ahí me permites el que me dé cuenta de cuál es tu origen y así luchar contra lo que verdaderamente es importante, sí me será útil y provechoso.

Me despido diciendo que no lucharé contra ti, lucharé contra tus padres, con tus creadores silenciosos como por ejemplo aquellas ideas de ser perfecto en todo lo que hago, obtener resultados inmediatos, ganar mucho dinero, tener éxito, caer bien a todo el mundo, etc., todas aquellas creencias que no sólo no me hacen feliz sino que contribuyen y favorecen tu nacimiento y que aún sigas ahí”.

JLC

No hay comentarios:

Publicar un comentario