viernes, 5 de agosto de 2011

HISTORIAS DE UN DOCTOR QUE AMA LA VIDA: sabiduría juvenil en clave hip hop!

Las pocas veces que he superado en la conversación con mi hija el diálogo de monosílabos y gruñidos, me he dado cuenta de que nos podemos comunicar y he intentado facilitarle alguna cuña sobre la influencia del pensamiento en sus emociones que le han sido de utilidad. Se define a sí misma como la persona más feliz del mundo.

Está de vacaciones hace tres semanas que no la veo pero me ha dedicado una canción Hip-Hop, ellos tienen sus propios canales. 

Para mí ha sido un obsequio que me gustaría mostraros.


Los adultos tenemos prejuicios contra los adolescentes, como siempre ha ocurrido. Pero intuyo que ahora contamos con la mejor generación que jamás hemos tenido.

 

La letra de la canción dice así:

Bien... Ahí me tenéis
en uno de esos días
en los que nadie te coge el teléfono
y las paredes se te echan encima.

Yo sé que siempre hay salida,
pero saber que todo irá mejor
no quita que me sienta hecho una porquería.

Pasan los años, los proyectos, los sueños...
¿Recuerdas cómo querías ser cuando eras pequeño?
Crecer es darse cuenta de que la vida no es como quisieras que fuera.
Todo es mucho más complejo.

Responsabilidades, luchas, deberes...
Sonreír cuando no te apetece...
Mentir para no hacer daño a la gente que quieres.
Fingir cuando perfectamente sabes que te mienten.

¿Merece la pena hacer lo que se supone que debes
más veces de lo que realmente quieres?
¿Por qué terminé haciendo lo que todos hacen
si se supone que siempre me sentí diferente?

He sido un cobarde disfrazado de valiente.
Siempre pendiente del qué dirá la gente.
Escondo mis miedos para parecer fuerte.
Pero ya no más, es hora de ser consecuente porque...
Porque creo que lo he visto, amigo, y...

[Estribillo]
Quizá la clave para ser realmente libre sea:
Reír cuando puedas y llorar cuando lo necesites.
Ser honesto con uno mismo,
centrarse en lo importante y olvidarse del ruido.

Quizá la clave para ser realmente libre sea:
Reír cuando puedas y llorar cuando lo necesites.
No obcecarse con los objetivos,
tratar de relajarse y vivir algo más tranquilo.

Con este tema me hago una promesa:
Y es hacer lo que sea para encontrar soluciones, no problemas.
Sé que no soy perfecto.
Bien, no me castigaré más por no serlo.

Voy a aprender a decir que no,
a aceptarme como soy, a medir el valor.
Porque a veces fui valiente por miedo.
Sé que suena extraño, pero ¿sabes qué?
Lo peor de todo es que es cierto.

Hoy busco dormir a gusto.
No suena muy ambicioso,
pero créeme, es mucho.

Llevo treinta años estudiando la vida.
¿Que no hay mal que por bien no venga?
Eso es mentira.

Me centraré en lo importante:
En mi familia, mis amigos, mi pasión por el arte...
Aceptaré que tengo derecho a estar de bajón de vez en cuando,
porque estar de bajón es humano.

No pienso rendirme ante ningún problema.
Confío en mí y soy capaz de vencer lo que sea.
Volveré a caer millones de veces,
pero siempre volveré a erguirme,
porque me di cuenta de que, oh...
Oh sí, amigo, me di cuenta de que...

Quizá la clave para ser realmente libre sea:
Reír cuando puedas y llorar cuando lo necesites.
Ser honesto con uno mismo,
centrarse en lo importante y olvidarse del ruido.

Quizá la clave para ser realmente libre sea:
Reír cuando puedas y llorar cuando lo necesites.

No obcecarse con los objetivos, 
tratar de relajarse y vivir algo más tranquilo.

Un abrazo muy fuerte:
Gabriel

2 comentarios:

  1. Me ha encantado la canción!!!, genial!!!, el autor seguro que también ha hecho esta terapia eh?, porque la canción es la bomba!!. La música es una herramienta estupenda para todos y para los jóvenes es muy importante. Me ha recordado que yo en mi época era fan de Sting y todo lo que decía para mí era como la Biblia, bueno pues me sirvió para saber que era Amnistia Intenacional, que había gente que se preocupaba por los derechos humanos, por los indios del Amazonas... luego todo pasa y te das cuenta de cómo en la adolescencia todo se vive con excesiva intensidad, la música, el amor, los ideales... ahora que ya soy mami pues lo que está en nuestras manos, es como haces tú Gabriel, ir mandando flashes de lo que estamos aprendiendo a nuestros hijos, que seguro que les va calando y al final les servirá de mucho, aunque parezca que no nos hagan caso...

    Os voy a explicar una anécdota, en la última conferencia de Rafa me quedé sin canguros y me tuve que llevar a mi hija de cuatro años, pues bien, en la conferencia se habló de la muerte. Ella se tiró toda la conferencia pintando. Cuando acabó la conferencia mi hija me preguntó por un vecino que tenemos que es bastante mayor y que está un poco malito y me dijo: "mamá, ¿el Sr. Antonio se va a morir pronto?", yo le contesté: "pues no sé hija, no lo sabemos, pero todos algún día nos vamos a morir y eso no es malo". Y mi hija me contestó: "Claro, porque la muerte es algo natural".

    Aunque había estado pintando durante toda la conferencia había estado escuchando... aunque el diálogo con los adolescentes sea en plan de gruñidos algo les va quedando seguro y, lo que nosotros estamos aprendiendo les puede ser muy útil a nuestros hijos. Ojalá mi hija, Gabriel, cuando sea adolescente se defina como la persona más feliz del mundo, creo que es lo más bonito que te puede decir un hijo y además si te regala esta súper canción, pues ya es la bomba!!. Felicidades Gabriel por tu trabajo como padre y por tener una hija tan estupenda.

    Un beso,

    Mónica

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  2. Gabriel, que sepas que tu hija no sólo te ha regalado esta canción a tí, indirectamente lo ha hecho a todos los padres que se pasean por este blog, dale las gracias de mi parte.
    Me alegró las vacaciones, pues me confirma que padres e hijos cantamos las mismas letras en la vida, sólo que el TEMPO y el TONO es diferente ... por eso como dice Mario en la filosofía Zen la clave está en la PACIENCIA...
    Maria Dolors

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